El final del sexenio del presidente Enrique Peña Nieto nos deja literalmente con la boca abierta y con las manos en la cabeza, por la serie de acontecimientos increíbles que se dan en las últimas semanas de la administración presidencial.
Hasta hace unos cuantos días dos trailers con centenas de cadáveres en Jalisco deambulaban por algunos municipios. El primero llevaba 157 personas sin vida en su interior. Fue descubierto por los fuertes hedores que despedía y por la denuncia ciudadana.
El segundo fue revelado por el director del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, quien precisó que se encontraba en las instalaciones de dicho instituto.
Son poco más de 300 cadáveres que fueron puestos en cajas de refrigeración de sendos trailers, debido a que no hay espacio suficiente para los cuerpos.
El caso tiene varias aristas: por un lado es un ejemplo de la incapacidad de las autoridades jaliscienses para darle cauce adecuado al incremento de tanto cuerpo sin vida, respetando no solo el protocolo de la necropsia, la información a los familiares y la inhumación o incineración correspondiente, sino que refleja también el descuido y la irresponsabilidad de las autoridades judiciales.
Es también el reflejo del incremento de los asesinatos y de la lucha contra el crimen organizado, que arroja un número tan impreciso como impresionante de víctimas de la violencia.
El otro hallazgo es el de mariguana sembrada en pleno Periférico en la Ciudad de México. Dos plantas de la Cannabis fueron plantadas en un camellón del transitado Periférico, por donde millones de automovilistas transitan diaria y frenéticamente.
Solo falta que empiecen a brotar amapolas en el segundo piso del propio Periférico, como muestra de la abundante droga que circula en una metrópoli cuyas autoridades negaron la existencia de cárteles de la droga y que ahora es presa de las luchas por las plazas donde el narcomenudeo es uno de los negocios crecientes.
El final de sexenio muestra la descomposición y la incapacidad de una administración federal, pero también la superficialidad, la ligereza y la impunidad en la impartición de la justicia: la exoneración de la ex lideresa del SNTE, Elba Esther Gordillo Morales y la pena de nueve años de cárcel y multa por 58 mil pesos al ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, son una bofetada para los mexicanos.
El final de sexenio es de parodia: el presidente Enrique Peña nieto protagoniza un sketch con el youtuber Chumel Torres que se ha viralizado en las redes sociales, mientras el país se hunde en un enorme cementerio donde ya no caben tantos cadáveres, con universidades públicas en crisis financiera y en un escenario de violencia que parece inacabable.