Por Víctor Manuel Chávez Ríos
El 20 de febrero de 2019 marca un hito en la historia de la UAZ y del estado de Zacatecas, la LXIII Legislatura del Estado aprobó la iniciativa, presentada por su Comisión de Desarrollo Cultural, para otorgar el de Benemérita a la Universidad Autónoma de Zacatecas, Francisco García Salinas, toda vez que el acuerdo se publique la UAZ podrá hacer gala de la distinción.
Para los universitarios zacatecanos este acto legislativo implica orgullo, satisfacción del deber cumplido porque las razones por las que se otorga este privilegio estriba en el reconocimiento en los servicios educativos, de difusión y extensión que ha brindado la UAZ a su entorno a lo largo de más de 150 años.
Hay que resaltar también que esto implica una responsabilidad y un compromiso que los universitarios debemos tener en cuenta. Es decir, debemos seguir plenamente conscientes que la Máxima Casa de Estudios del Estado se debe a la sociedad que la sostiene y requiere de ella, esta apostilla nueva es signo del compromiso de continuar con la calidad en los quehaceres universitarios.
El significante de Benemérita tiene el significado de merecer agradecer, ser premiada, o estimada por sus actividades en beneficio de la colectividad, a partir de esta decisión del Congreso de Zacatecas, la UAZ podrá ostentar esta alabanza en su nombre y los zacatecanos podremos vanagloriarnos de ello.
Debo decir antes de continuar en este texto que los títulos y dignidades que se le puedan otorgar a la UAZ son bien recibidas. Es de gente bien nacida agradecer a quien nos beneficia, brinda sus servicios a la comunidad en la que está inserta y a la cual se debe, pero un reconocimiento de esta índole no debe ir solo, tiene que ir acompañado de acciones que hagan patente este agradecimiento de manera que le favorezca seguir cumpliendo su función original.
Sin embargo, poco o muy poco se ve reflejado este honroso título, sin lograr un avance en materia presupuestal para nuestra Alma Mater, la institución de educación superior con más tradición, mayor trayectoria y convalidación con su entorno, requiere de una política de gestión lo suficientemente eficaz para lograr abatir su rezago financiero y administrativo. Para que pueda sentirse orgullosa de portar tan importante alabanza es necesario que logre avanzar en este ámbito y lograr avanzar de manera integral.
Señores diputados de la LXIII Legislatura ha llegado el momento de revisar las aportaciones del presupuesto estatal a la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas, Francisco García Salinas, las otras instituciones estatales que han sido distinguidas con este galardón tienen una aportación de sus estados del orden del treinta por ciento mientras que la UAZ tiene un 19.6 por ciento.
Como se puede observar es necesario gestionar un incremento del diez por ciento aproximadamente, es verdad que esto no solucionará el problema presupuestal de la UAZ pero marcará un inicio para gestionar un aumento de subsidio en el orden federal. La legislatura podría ser la que encabece este movimiento como parte de este proceso para declarar Benemérita a la UAZ con un presupuesto decoroso.
Por supuesto que va a ser un proceso que deberá convocar a cada uno de los sectores sociales del estado de Zacatecas para defender a la institución educativa pública por excelencia, con una trayectoria fuera de toda duda que inicia en la segunda mitad siglo XVIII, con el la apertura del Colegio de San Luis Gonzaga, su paso al Instituto Literario de García en el siglo XIX, luego el Instituto de Ciencias de Zacatecas en el siglo XX, después el Instituto Autónomo de Ciencias de Zacatecas, a partir de 1968, Universidad Autónoma de Zacatecas “Francisco García Salinas” y en el siglo XXI, en 2019, Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas “Francisco García Salinas”.
En este proceso cada uno de los sectores sociales deberá participar activamente para lograr la congruencia entre lo que se dice y lo que se hace. La institución por su parte deberá ajustarse a continuar con su trayectoria de calidad en el servicio y a la rendición de cuentas, de acuerdo con la normatividad vigente tal como lo ha hecho. El liderazgo en este proceso deber ser ejercido por quien otorga el reconocimiento para hacerlo lo más congruente y visible.