Rusia pidió hoy al exanalista estadounidense de la CIA Edward Snowden que decida si pide o no asilo político en Rusia, cuyo presidente, Vladímir Putin, le puso como condición para quedarse en el país que renuncie a sus actividades contra EU.
“Partimos de que sin su decisión personal en uno u otro sentido, sin que él entienda qué es mejor y cuál es la óptima salida para él, no podremos decidir por él”, afirmó Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores ruso, citado por las agencias locales.
El diplomático agregó: “El señor Snowden, a día de hoy, no ha presentado una solicitud de asilo político en Rusia”.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, informó el martes de que Snowden había renunciado a quedarse en Rusia, donde se encuentra desde el pasado 23 de junio en la zona de tránsito del aeropuerto moscovita de Sheremétievo.
El fugitivo, reclamado en Estados Unidos por espionaje, tomó esa decisión después de que Putin condicionara esta semana la concesión de asilo al hombre que destapó una trama de espionaje masivo de las comunicaciones telefónicas y en internet.
Putin dejó claro que para quedarse en Rusia Snowden debería cesar sus filtraciones y toda actividad dirigida contra los intereses de los Estados Unidos, país al que calificó de “socio” de Rusia.
Con todo, las autoridades rusas han dejado claro que no entregarán en ningún caso a Snowden, independientemente de las acciones que haya cometido.
Según el Kremlin, Snowden ha pedido asilo en quince países -veintiuno, según WikiLeaks-, muchos de los cuales o han rechazado tal solicitud, o han puesto como condición que el demandante se encuentre en su territorio.
Los rumores de que Snowden se encontraba en el avión del presidente de Bolivia, Evo Morales, que partió el martes de Moscú con destino a su país, provocó un escándalo diplomático internacional.
Varios países europeos impidieron al avión presidencial boliviano que sobrevolara sus espacios aéreos, lo que ha causado una unánime condena en el continente latinoamericano.