El municipio de Guadalupe, uno de los de mayor crecimiento poblacional del país y el segundo más poblado del estado, atraviesa por una severa crisis de gobernabilidad debido a la falta de liquidez financiera, pero también por la ausencia de una conducción de su administración municipal.
Con una deuda que el nuevo alcalde de Morena, Julio César Chávez Padilla estima en aproximadamente 850 millones de pesos, mostró su insolvencia para pagar de forma completa la quincena de los trabajadores del departamento de Limpia, quienes se negaron a laborar sin una remuneración.
De acuerdo a declaraciones el año pasado del entonces presidente municipal priista, Enrique Flores Mendoza, en el municipio se recaudan aproximada y diariamente 180 toneladas de basura, lo que significaría que se dejaron en la calle y en casas, unas 540 toneladas más las de este día sumarían 720 toneladas de desechos al amanecer del lunes.
Para colmo de la crisis de basura que sufre el municipio, esta mañana fueron tomadas desde temprana hora las instalaciones de la presidencia municipal guadalupense.
¿Quién gobierna en Guadalupe?
La primera opción en la resolución del problema fue la iniciativa del alcalde Julio César Chávez Padilla de salir personalmente a recoger basura en algunas camionetas particulares, lo que a todas luces es insuficiente para solucionar una problemática que rebasa su capacidad recolectora.
Más preocupados por tomar fotos y algunos videos, su equipo de colaboradores trataron de revertir de esa manera la problemática que aqueja a los ciudadanos, pero sin lograr cumplir su objetivo.
¿Cuántas bolsas de basura cargó el alcalde? No se sabe porque en las fotos se aprecia muy mínimamente la acción.
Sin embargo se omitió el fin de semana informar sobre las gestiones que realiza el presidente municipal para gestionar, por ejemplo, el adelanto de una partida presupuestal para pagar la quincena que adeuda a los trabajadores del departamento de Limpia.
En pocas palabras, el alcalde guadalupense debió evitar el paro de labores y mostrar sus habilidades de negociación y de gestoría de recursos, pero perdió esa oportunidad; su acción se enfocó más hacia el campo mediático, en el que se ha movido más desde antes de llegar a gobernar al municipio.
Mal empiezan los alcaldes a los que el conflicto los ha alcanzado desde el primer día de labores y de gobierno. Guadalupe y Zacatecas encabezan una problemática laboral que, aunque distinta, el fondo es el mismo: la falta de capacidad inicial para conducir las riendas de estas demarcaciones municipales.
¿Y a qué hora van a gobernar?