Por Juan Gómez
Director general de Pórtico Mx
Zacatecas refleja, en cierta medida, lo que sucede en el país en cuanto a los cambios de la sociedad y las nuevas formas de la política mexicana, al registrar imposiciones, traiciones, manipulación, chapulineadas de un partido a otro y pérdida de la identidad ideológica por el pragmatismo en la búsqueda del poder.
Muestra también las contradicciones entre las cúpulas partidistas y las demandas locales que son rebasadas con indiferencia, para imponer no solamente candidaturas, sino para consolidar cacicazgos locales, regionales y estatales, que comulgan con la actual administración.
Al igual que en otras entidades del país, en Zacatecas se impusieron candidaturas, se modificaron siglados y se marginaron las demandas locales, para imponer los intereses, los compromisos de la Cuarta Transformación y de las relaciones políticas del presidente López Obrador con los cacicazgos locales.
Es lo mismo que sucedió en la época porfiriana, cuando el dictador Díaz fortalecía los cacicazgos estatales y regionales, para mantener lo que se conoció como “la paz porfiriana”, que no era otra cosa que afianzar los controles territoriales con el poder del centro.
Morena no es un partido sino el brazo de control político del presidente Andrés Manuel López Obrador, su fundador y dueño, por eso en las mañaneras defiende la postulación del candidato Félix Salgado Macedonio y desaparece a su instrumento, Mario Delgado, quien solamente le da sustento jurídico electoral a las nominaciones de candidaturas en Guerrero y en el país.
La comunicación directa es entre el titiritero y el títere que obedece ciegamente, sin tomar en cuenta a la secretaria general de Morena, Citlalli Hernández, quien se entera a través de los medios sobre las decisiones, cambios, trueques, acuerdos, en las candidaturas de su partido. Una vergüenza.
Morena postuló a ocho hombres y siete mujeres para cumplir con la paridad de género aprobada por el Instituto Nacional Electoral en el proceso 2020-2021, lo que ha generado mucha polémica entre sus militantes por lo siguiente: dos son ex priistas, cinco ex perredistas y priistas y solo dos no tienen militancia partidista, sino que eran delegados de los programas sociales en sus estados.
La ex priista Mónica Rangel fue designada candidata al gobierno potosino; Clara Luz Flores en Nuevo León; Layda Sansores, en Campeche; Lorena Cuéllar, en Tlaxcala; Alfonso Durazo, en Coahuila; David Monreal, en Zacatecas.
En Colima se designó a Indira Vizcaíno, ex delegada de Programas para el Desarrollo del gobierno de la República; la académica Marina del Pilar Ávila, ex alcaldesa de Mexicali, en Baja California; en Sinaloa postuló al ex rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa y ex perredista, Rubén Rocha, actual senador con licencia.
En Baja California Sur registró al ex perredista, Víctor Manuel Castro Cosío; en Michoacán se postuló a Raúl Morón, ex alcalde de Morelia, lo que causó la salida de Cristóbal Arias; en Nayarit, al ex perredista Miguel Ángel Navarro, quien militó en el PRI por 29 años.
¿Y qué decir de la designación de Morena en Guerrero con la candidatura de Félix Salgado Macedonio? El presidente decidió, desde un principio así estaba trazado, no romper el pacto de impunidad y respetar su compromiso con el senador con licencia sobre quien recaen cinco denuncias de acoso sexual y violación.
En Chihuahua Morena también postuló al delegado de los Programas para el Desarrollo en dicho estado, Juan Carlos Loera.
En las designaciones de los partidos en Zacatecas se reflejó el nuevo estilo de gobernar en el país en la Cuarta Transformación, pues las presiones mediáticas o de movilización social y políticas, no variarán el rumbo de las decisiones presidenciales.
Las impugnaciones del Comité Directivo Estatal de Morena en Zacatecas, no modificaron la designación del hermano del senador Ricardo Monreal Ávila, como tampoco las impugnaciones ante los órganos jurisdiccionales electorales.
Si en Guerrero, cuyo conflicto se volvió tendencia y ha desgastado fuertemente la propuesta de la candidatura de Morena, no se modificó la decisión de candidatura, en Zacatecas menos.
Lo que está en el nuevo escenario de las propuestas electorales que conformarían el mapa político nacional, es la consolidación de los cacicazgos políticos locales, que permitirán abrir la puerta a la tendencia del predominio transexenal del presidente López Obrador en el país.
La respuesta y la decisión esta en la boleta que introduzcan en la urna los ciudadanos y ciudadanas el seis de junio de este año 2021.
Empero está claro que no hay identidad política y menos aún ideológica, como tampoco existe en la alianza “Va por México” con la fusión del PRI, PAN y PRD, otrora rivales en las contiendas electorales. Las fronteras ya no existen.
Al tiempo.