El presidente sirio, Bachar al Asad, reiteró este jueves que su país “se defenderá contra cualquier agresión” y agregó que Siria está dispuesta a “librarse del terrorismo que apoyan Israel y los países extranjeros”.
En una reunión con parlamentarios yemeníes, Al Asad les transmitió que las “amenazas de un ataque directo aumentarán la defensa de nuestros principios firmes y de las decisiones independientes”, según recogió la agencia oficial siria Sana.
Por otra parte, el gobierno británico difundió este jueves un informe jurídico que afirma que un ataque a Siria en respuesta al uso de armas químicas sería legal incluso sin el visto bueno de la ONU. La base legal para un ataque sería la “intervención humanitaria”, dice el informe, difundido por un portavoz del primer ministro.
Mientras Rusia exigió que las inspecciones de la ONU para aclarar el presunto uso de armas químicas se extiendan a otros tres lugares del país donde según Damasco fueron empleadas por la oposición al régimen del presidente sirio.
“En particular, las inspecciones deben ser realizadas, además de los alrededores de Damasco, en otros tres lugares, entre ellos la localidad de Jan al Asal”, cerca de Aleppo, señala un comunicado del portavoz del Ministerio ruso de Exteriores, Alexandr Lukashévich, publicado en la web de la cancillería.