Por Juan Gómez (@juangomezac)
Director general de Pórtico Online
Luego de la decisión de los electores (más del 50% del padrón electoral nacional) en 14 entidades del país, doce de las cuales renovaron sus respectivas gubernatura, México entró en una nueva composición político electoral a todas luces engañosas en la tendencia pero certera en el desgaste –otra vez- del priismo en el país.
El Revolucionario Institucional perdió las elecciones para gobernador en los estados de Aguascalientes, Durango, Chihuahua, Veracruz, Quintana Roo, Puebla y Tamaulipas, a causa de los malos gobiernos del tricolor.
Mientras que el Partido Acción Nacional prácticamente duplicó la población que gobierna al pasar de 16 millones 886 mil 234 personas, a 35 millones 367 mil 955 personas. A su vez el PRD no obtuvo un buen resultado, pese a la alianza con los blanquiazules en algunos estados.
El año pasado los estados gobernados por mandatarios panistas eran Baja California, Baja California Sur, Guanajuato, Puebla y Querétaro; a los que se sumaron Aguascalientes, Chihuahua,Tamaulipas y refrendó en Puebla, en tanto que ganó las elecciones con alianza perredista en las entidades de Durango, Quintana Roo y Veracruz, que en conjunto suman 18 millones 481 mil 721 personas.
En tanto el PRI sufrió un fuerte retroceso al perder las elecciones del pasado cinco de junio en los estados que gobernaba como de Veracruz, Durango, Quintana Roo y Tamaulipas, en donde no se había generado alternancia, lo que lo coloca en una situación de perspectiva débil, electoralmente hablando en la ruta de la elección presidencial del 2018.
El tricolor gobernaba nueve de las 12 entidades en disputa por gubernatura. Retuvo Hidalgo, Tlaxcala y Zacatecas, recuperó Sinaloa y Oaxaca.
Pero no es solamente un tema de números sino de formas de gobernar, de resultados de las administraciones priistas, sino también del gran desgaste que ha sufrido el gobierno federal en el quehacer de la política interna, seguridad, economía y sobre todo, en la imagen del presidente Enrique Peña Nieto.
El resultado electoral afecta, sin duda el avance del actual líder nacional priista,Manlio Fabio Beltrones Rivera, pues fue el responsable de la estrategia y la designación de candidatos a los gobiernos estatales, pero en nada favorece al resto de los aspirantes en la ruta presidencial: Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación y Aurelio Nuño Mayer, Secretario de Educación Pública.
El criterio que, por ejemplo, utilizó el dirigente nacional priista, Manlio Fabio Beltrones, fue el de negociar con cada mandatario la designación del candidato, lo que seguramente contribuyó a la derrota en algunos estados, en los que los mandatarios administraron de manera caótica las finanzas pero además, ejercieron el poder de manera abusiva y de espaldas a los gobernados.
En Zacatecas, uno de los cinco estados donde ganó la elección, las circunstancias fueron distintas a causa de los errores que cometieron los estrategas de David Monreal Ávila, candidato de Morena, quien desestimó la designación de buenos candidatos en el territorio zacatecano, careció de un coordinador de campaña y además, los responsables de la estrategia mediática fueron traídos de la Ciudad de México, sin tener conocimiento de la naturaleza y penetración de los medios locales. Además, como podrá observarse, la guerra sucia causó estragos en el posicionamiento de imagen del candidato, quien careció de capacidad de respuesta para contrarrestar los embates de su principal oponente.
El Movimiento de Regeneración Nacional avanzó sustancialmente en Zacatecas, en esta primera participación en un proceso electoral no le fue tan mal, pese a no lograr la gubernatura. Sin embargo triunfó en la capital del estado y se posicionó como la segunda fuerza política en la entidad.
David Monreal no ganó la gubernatura, lo que constituyó su tercera derrota electoral desde que el grupo Monrealista dejó de ser gobierno del estado, lo que seguramente lo alejará por un buen tiempo de las contiendas electorales, aunque su hermano Saúl seguramente contenderá por la presidencia municipal de Fresnillo en el 2018.
Por otro lado el gobernador electo, Alejandro Tello Cristerna, no tiene un panorama muy fácil para ejercer el gobierno en los próximos dos años, pese a que el PRI ganó la mayoría en el congreso con 15 diputados en lo que será la LXII legislatura.
El priismo gobernará en 28 municipios zacatecanos, menos en la capital del estado, pero tendrá serios problemas de financiamiento para los 58 ayuntamientos, que seguramente sufrirán sacudidas laborales y enfrentarán problemas de endeudamiento generados por sus antecesores.
El tema de insuficiencia económica y de corrupción serán seguramente los principales a los que se enfrentará Tello Cristerna al inicio de su mandato, el cual estará tocado por la sombra de su antecesor.
El actual gobernador electo de Zacatecas deberá analizar fríamente los resultados electorales, para poder conformar un equipo de trabajo, delinear su plan de gobierno quinquenal y sobre todo, ejercer el poder con autonomía, sin imposiciones del pasado.
Para tal efecto debe considerar que el haber obtenido el 32.8 por ciento en la presente elección, por un lado no legitima una preferencia mayoritaria y por otro, lo coloca en una seria desventaja con el resultado del 43.1 por ciento obtenido por la alianza PRI, Verde, Panal, en la elección de 2010.
En cuanto a la composición en el congreso, si bien es cierto que obtiene mayoría de escaños en lo que será la LXII legislatura de Zacatecas, ninguno de los legisladores electos es plenamente de su confianza, puesto que fueron designados con la aprobación del actual mandatario, lo que dificultará la coordinación con el Poder Legislativo.
La LXII legislatura obedecerá más los lineamientos del actual gobernador Miguel Alonso Reyes, que a los de quien gobernará a partir del 12 de septiembre, cuando rinda protesta como gobernador constitucional del estado de Zacatecas, por lo que tendrá que esperar dos años para reconformar la composición del Poder Legislativo y cerrar con autonomía legislativa el complemento del quinquenio.
Particular atención tendrá sin duda la capital del estado que será gobernada por el Movimiento de Regeneración Nacional durante dos años, tiempo en el cual serán observados con minuciosidad los actos del gobierno municipal, a donde llegará una política carente de experiencia en el gobierno municipal. ¿Con quiénes gobernará?
Son muchos los retos que tiene el gobernador electo Alejandro Tello Cristerna, pero el inmediato es el criterio que aplicará para la integración de su gabinete.
Al tiempo.