ZACATECAS. El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló reconoció un decrecimiento en el turismo de fe, especialmente en los destinos de Plateros y en Tacoaleche.
Desde hace 5-7 años, según palabras del obispo, han disminuido las visitas al Santo Niño de Atocha en Fresnillo y del niño de las Palomitas en Tacoaleche debido a la inseguridad.
“Lo mas delicado es que afecta en la confianza, inspira miedo el salir, estas a la defensiva, eso daña la confianza de las demás personas” por otro lado, agregó que económicamente también afecta a la iglesia ya que la gente que va a los santuarios deja dinero y de esta manera es que se sostienen muchas actividades de las iglesias.
Otro factor que influye en la participación en los actos de fe es la migración, Noriega Barceló puso como ejemplo Juanchorrey, comunidad perteneciente al municipio de Tepetongo, donde viven aproximadamente 300 personas pero durante la fiesta patronal reciben a poco más de mil personas de otros estados e incluso del extranjero.
Dentro del programa programa 3×1, consistente en que por cada peso que los migrantes aportan, los tres ordenes de gobiernos se comprometen a aportar otro peso cada uno de ellos, el obispo precisó que “La condición de aportar es que sea para su templo; el hilito de fe que no se termina y que esta haciendo unión y saneando de alguna manera el tejido social”.
El obispo señaló que estos son solo algunos factores que contribuyen a la disminución del turismo de fe, sin embargo señaló que hay mas fenómenos que afectan en particular aquí en zacatecas.
Noriega Barceló preciso que más que turismo es gente que peregrina por fe, explicó que el turismo religioso es visitar lugares que tienen que ver con la fe como catedrales o monumentos, mencionó la Basílica de Guadalupe y la catedral basílica de San Juan de lagos.
LA FE SE EXPRESA MÁS EN COMUNIDADES O MUNICIPIOS PEQUEÑOS
Noriega Barceló explicó que el cambio cultural en ciudades capitales como Zacatecas afecta porque no es el mismo ritmo de vida que en comunidades o municipios más pequeños “Si es algo que ya nos hace pensar que en la ciudad las fiestas ya no son lo mismo, no nos hace pensar en estrategias sino como evangelizar y como expresar de otra forma nuestra fe en un ambiente urbano, mas individualista e intimista”.
Hizo un contraste con el ambiente rural en donde la gente desea manifestar su fe públicamente y cuentan con tradiciones muy fuertes que le dan identidad y cohesión al pueblo.