Por Juan Gómez
Director General de Pórtico Mx
A Liliana Gutiérrez, periodista agredida por el gobierno por su trabajo profesional, ante la parcialidad de la CEDH
El gobernador David Monreal Ávila presentó parcialmente un escenario catastrófico, de “emergencia social”, en el que no hay presupuesto para pagar la próxima quincena, por lo que consideró que Zacatecas “agoniza” y que, por lo tanto, no es el mejor momento para gobernar “pero si para sacar la casta de lo que estamos hechos”.
A partir de hoy Monreal Ávila es el responsable no solo de la conducción del estado que lo vio nacer, sino de implementar las políticas públicas que lo lleven a un mejor desarrollo y sobre todo, a la solución de su problemática interna.
En Zacatecas culminamos un quinquenio de estancamiento, de abandono por parte de los gobiernos priistas y morenistas, pero también de un gobernante desprovisto del compromiso para luchar por sus gobernados, sin pasión por la política, alejado del poder y controlado por el poder fáctico que lo impuso -el ex gobernador Miguel Alonso- y a quien protegió durante cinco largos años.
Empero los próximos seis años que empiezan a contar a partir de este momento, no parecen ajenos a una realidad que podría repetirse.
No me dejen solo, vayamos juntos, clama el gobernador que hoy rindió protesta de Ley ante el Poder Legislativo y ante el pueblo de Zacatecas.
El nuevo gobernador del estado citó en su discurso varias expresiones de la narrativa presidencial, con la que trató de emular y, en cierta manera, empatar el discurso oficial al del presidente López Obrador. No hubo originalidad discursiva, se careció de alguna novedad que refrescara el ambiente de desazón que prevalece en el estado.
Sin embargo, David Monreal, enfatiza algo con mucha puntualidad. Señala que el tema de temas es el de la seguridad. Tiene razón. Muestra su preocupación por la tranquilidad de las familias zacatecanas y pone énfasis en la intervención de la Guardia Nacional la cual, por cierto, ha sido pasiva hasta este momento para contener los embates de los cárteles de la violencia en el estado.
Monreal Ávila ratificó en los primeros minutos del domingo al actual secretario de Seguridad Pública en el estado, Arturo López Bazán, designado por la federación. Busca que haya continuidad y que no se parta de cero, pese a que los resultados hasta este momento no han sido del todo satisfactorios.
El propio gobernador entrante dio un dato fresco en su discurso de toma de posesión:
Combatir la violencia sin duda será uno de los más grandes retos de mi administración. Si tomamos en cuenta que este mes de agosto fue el más violento de los últimos seis años, al contabilizar una penosa y devastadora cifra de más de 167 homicidios dolosos…
Para contrarrestar este fenómeno de violencia constante en el estado, el mandatario propuso lo siguiente:
la presencia de la Guardia Nacional en todos los municipios, habrá una coordinación integral y efectiva de los cuerpos de seguridad en todo el estado con las corporaciones federales y se pondrán en marcha programas de prevención del delito para fortalecer la educación, la cultura y el deporte a nivel de comunidad.
Combatir la violencia, dijo con sinceridad, será uno de los más grandes retos de mi administración.
Pero no solamente este será el mayor reto, destaca también el financiero. El propio Monreal Ávila señaló que “Los fondos para la educación no se han cubierto y hay muchas deudas por pagar. Incluso, no hay recurso económico para solventar el pago de salario de la próxima semana. Esa, esa es la realidad de Zacatecas”.
Remató con la siguiente expresión:
Recibimos un estado frente a una verdadera emergencia social. Nuestra economía, ahora fuertemente golpeada por la pandemia, ha estado estancada en los últimos 11 años, el gobierno no tiene recursos ni siquiera para lo más elemental.
Lo que no mencionó el mandatario es que los dos últimos años del gobierno del priista Enrique Peña Nieto y los tres de Andrés Manuel López Obrador, Zacatecas fue abandonado a su suerte.
La presencia del senador Ricardo Monreal Ávila y del canciller Marcelo Ebrard Casaubón, podría ser un indicio de apoyo gubernamental para el estado, pero no parece que vaya a ser así, puesto que ambos políticos están inmersos en la sucesión presidencial y al parecer, están ausentes del radar de las preferencias de López Obrador.
Vientos de cambio cruzan el cielo zacatecano que entró a partir de hoy en una nueva etapa gubernamental, política, económica y social que, deseamos todos, sea de beneficio para todos quienes habitamos esta histórica tierra.
Pero la realidad nos indica, en este momento, que no hay certeza para basar el optimismo en un mejor presente.
Sin embargo, al igual que el presidente López Obrador quien en su primer discurso de triunfo señaló que quería ser el mejor presidente de México, en esta ocasión en su toma de posesión, el gobernador constitucional David Monreal Ávila, afirmó que “mi único anhelo, mi único sueño, ojalá Dios lo permita, es ser el mejor gobernador que haya tenido Zacatecas”.
Al tiempo.