Por Juan Gómez
Los medios de comunicación se han centrado en la sucesión adelantada en el partido gobernante Morena, en donde son muchos los y las suspirantes que juegan a la silla del poder, pero en el Partido Acción Nacional quien se ha apoderado de este partido es el presidente municipal de Zacatecas, Miguel Varela Pinedo.
Desde la campaña electoral el ex presidente municipal de Tlaltenango y actual alcalde capitalino, ha tenido el patrocinio y apoyo político de la gobernadora de Aguascalientes, Tere Jiménez, con quien de su mano busca la candidatura panista al gobierno de Zacatecas.
Después de un año de desempeño en el gobierno municipal, se ha visto la escasa capacidad que tiene el alcalde para gobernar, su nulo compromiso con los capitalinos pero sobre todo, su forma de hacer política en Zacatecas, la cual tiene un comunicador común: el control personal y el pleito.
Varela Pinedo todo lo controla en el panismo en donde la democracia es letra muerta y prevalecen los intereses del edil capitalino, puesto que lo primero que hizo fue imponer a su subordinado Aldo Peláez, quien sigue a pie juntillas cada una de sus indicaciones para que sea el próximo candidato de Acción Nacional a la gubernatura de Zacatecas.
En el panismo zacatecano la sucesión también está controlada y adelantada y su manejo es tan similar como lo que critica de Morena, esto es, imponer a una sola expresión dominante en la esfera azul. No hay más.
En este contexto el panismo está atrapado, cooptado, secuestrado o como le quiera llamar, por un solo político, el alcalde capitalino.
Pero vayamos a un punto que es importante y que será tomado en cuenta por los zacatecanos de la capital en las mediciones, ya que en primer lugar habría que pensar ¿Contra quién de su partido se medirá Miguel Varela?
Algunos podrían pensar que con la diputada Noemí Luna Ayala, la actual vice coordinadora de la fracción parlamentaria blanquiazul en la LXVI legislatura, quien se ha convertido en una de las voces más críticas anti morenistas y anti presidenciales, pero ella le ha dejado todo el control a Varela para concentrarse en el trabajo político en el CEN panista.
¿Pero cuál es el posicionamiento de Varela Pinedo?
En la medición de agosto de 2025 que realiza la empresa Consulta Mitofsky sobre los alcaldes del país, el de Zacatecas, Miguel Varela Pinedo, se ubica en el lugar 126 de 150 con solo 39.07 por ciento de aprobación, lo que evidentemente lo ubica en una tabla baja de aceptación de la población gobernada en su municipio.
La empresa consultora evaluó a los alcaldes de acuerdo al partido que pertenecen y en cuanto a los presidentes municipales panistas, el de Zacatecas ocupó el lugar número 31 de 35 con un porcentaje de aceptación de solo el 40.07% en junio y 39.07% en el mes de agosto, en donde se observa una tendencia a la baja, con el 58.7 por ciento en desaparobación.
Lo anterior tiene su explicación en el escaso trabajo que ha hecho el alcalde zacatecano en la demarcación municipal, puesto que el descuido de la ciudad es evidente y se traduce en calles sin mantenimiento y en un centro histórico (patrimonio cultural de la humanidad) muy descuidado y sin una propuesta de atención a los múltiples problemas que padece.
Si bien es cierto que el alcalde tiene una marginación política con el gobierno del estado, su estrategia la ha centrado exclusivamente en el pleito personal con el gobernador, David Monreal, con el secretario general de Gobierno, Rodrigo Reyes, con el director de la JIAPAZ y con cuanto funcionario se le ponga enfrente.
Sin embargo el trabajo en comunidades y en la ciudad no se ve reflejado con la misma energía con la que inicia un pleito tras otro.
Con estos resultados y el control que tiene en su partido, Miguel Varela no tendría la fuerza suficiente para contender por una eventual candidatura panista, debido a que no ha logrado éxito en el ejercicio del gobierno municipal hasta este momento.
Al tiempo.
@juangomezac




























