El nuevo gobierno de Francia, que desde enero de 2015 ha sufrido una oleada de atentados yihadistas sin precedentes en su historia, prevé que los atentados continuarán en su territorio, reconoció hoy el nuevo primer ministro francés Edouard Philippe.
“Habrá otros ataques, otros dramas, otras víctimas arruinadas”, declaró este martes el jefe de gobierno en su primer gran discurso ante el parlamento galo desde que fue nombrado en mayo pasado.
“No bajaremos la guardia. Lucharemos contra el terrorismo con la más extrema dureza”, agregó Philippe durante su intervención ante la plenaria de la Asamblea Nacional, cámara gala de diputados, en la que explicó las prioridades de su gobierno.
El jefe de gobierno del presidente Emmanuel Macron estimó que los franceses han demostrado que no han cambiado sus hábitos de vida pese a los atentados que ha sufrido el país desde 2015 y que se saldaron con más de 200 muertos y centenares de heridos.
“Hay en nuestro país una forma de coraje tranquilo, pero real”, comentó Philippe al anunciar que el gobierno levantará “como muy tarde el primero noviembre próximo” el estado de emergencia decretado en noviembre de 2015 luego de los atentados contra la sala Bataclan de París.
Durante su discurso, de más de una hora de duración, Edouard Philippe, homenajeó a los policías y gendarmes por su trabajo para mantener la seguridad en Francia así como “a todos los que no vemos, que no conocemos, nuestros soldados en la sombra”, dijo, en referencia a los servicios secretos franceses.