A través de un comunicado, la Cámara Minera de México hizo un llamado a las autoridades estatales y federales a emitir su posición, ante el cierre indebido de la mina Peñasquito, ubicada en Mazapil, Zacatecas, desde el pasado 27 de marzo por miembros de la compañía transportista “CAVA”, y atender la problemática de manera expedita, toda vez que afecta los ingresos de 20 mil personas que trabajan de manera directa e indirecta en esta operación minera.
Hasta el momento, no hay un mensaje por parte de las autoridades que brinde certeza a empresas e inversionistas. Como consecuencia de este bloqueo ilegal la empresa Newmont Goldcorp México señala pérdidas de 50 millones de pesos diarios, lo que perjudica gravemente el bienestar de las familias zacatecanas y la vida comunitaria de 25 poblaciones vecinas. Cabe señalar que el 80% de los empleados de Peñasquito son originarios de Zacatecas y más de 500 son residentes de las comunidades aledañas.
La situación de Peñasquito es una prueba de la enorme incertidumbre que frena el desarrollo óptimo de la industria minera como una actividad económica generadora de empleos dignos. Es fundamental que las empresas mineras del país puedan trabajar sin estar sujetas a presiones y legales y que se antepongan los empleos bien remunerados, las acciones a favor de la comunidad y el medio ambiente que promueve el sector minero en vez de intereses individuales o de grupos.
El comunicado agregó que en el caso de Peñasquito, el grupo cameral reitera la necesidad de resolver cuanto antes, por la vía legal y apegado al Estado de Derecho, este problema que afecta directamente a los habitantes de Mazapil y a miles de zacatecanos.