El gobernador del estado Miguel Alonso Reyes tiene un cierre de año muy complicado en lo político, económico y de seguridad, a causa de que los conflictos se han abierto en varios frentes y a la falta de oportunidad para afrontarlos con eficacia y apertura.
Aún y cuando el escenario se mostraba complicado en cuanto a la política interna el Ejecutivo del estado decidió no postergar su gira de trabajo que duraría una semana por Finlandia, Dinamarca y Suecia, región nórdica de Europa a la que por primera vez un mandatario zacatecano realiza una promoción industrial y comercial.
Fue por ello que al regreso del periplo el gobernador Alonso Reyes se encuentra en un escenario muy complicado no solo en el ámbito político parlamentario, sino también en materia de seguridad.
Hoy el Ejecutivo del estado tiene que emplearse a fondo para salvar la situación que cada vez golpea con más fuerza la estructura de la estabilidad política de su administración, y debilita su imagen cuando agoniza el último año de su ejercicio gubernamental.
La intercepción telefónica la semana pasada de una conversación entre el diputado Mario Cervantes y el ex Secretario de Gobierno y actual coordinador de los diputados federales en San Lázaro, Francisco Escobedo Villegas, en la que se ve involucrado el Auditor Superior del Estado (ASE) Raúl Brito Berumen, puso de manifiesto un aspecto del cabildeo gubernamental para obtener el apoyo de algunos legisladores del bloque opositor a la aprobación del empréstito de 1,700 millones de pesos, de acuerdo a información proporcionada por el Secretario de Finanzas, Fernando Soto Acosta.
Con la solicitud del crédito que deberá aprobar la LXI legislatura zacatecana con mayoría calificada, se pretende reestructurar la deuda de la actual administración y en especial, la de corto plazo, así como pagar a proveedores y a terceros, para dejar una deuda de aproximadamente 8,900 millones de pesos. (http://www.imagenzac.com.mx/nota/solicitaran-prestamo-nde-1-700-millones-00-10-10-g).
Pero la mayoría priista se ha enfrentado a un escenario cambiado, a la renuncia de la fracción parlamentaria del Verde que conforman Cuauhtémoc Calderón Galván y Susana Rodríguez, y a la negativa del diputado Luis Acosta, quien a contracorriente de sus bancada, ha apoyado sistemáticamente a las iniciativas del PRI en el congreso.
Hasta este día continúa en suspenso la convocatoria para una nueva sesión, que podría ser el próximo martes, para que se discuta y se someta a votación el dictamen para contraer más deuda pública a la actual administración alonsista.
Pero la presión aumenta cuando el bloque opositor de la LXI legislatura demanda juicio político en contra del gobernador Miguel Alonso Reyes, “por transgredir la separación de poderes con la entrada de policías estatales y ministeriales, quienes lo acompañaron al edificio del congreso cuando presentó su informe de gobierno el 8 de septiembre”. (http://www.jornada.unam.mx/2015/12/04/estados/037n1est).
En este escenario de conflicto y tirantez con 11 diputados de oposición en el congreso zacatecano, se genera un cierre de año que se ve seriamente afectado por la serie de ejecuciones que se han realizado en los últimos meses del 2015, período en el que Zacatecas se mantiene entre las entidades del país con un mayor índice de secuestros, de acuerdo a la organización Alto al Secuestro y de acuerdo a datos proporcionados por la Secretaría de Gobernación.
En el pasado V Informe de Gobierno el mandatario estatal dio a conocer que en cinco años de su administración se han invertido 3,500 millones de pesos “que en otras condiciones pudieron ser destinados a proyectos más lucidores de obra pública, pero que optamos desde el principio por invertirlos en la infraestructura, el equipamiento, la capacitación, los salarios para el personal de seguridad y la procuración e impartición de justicia”.
A pesar del esfuerzo en materia de inversión presupuestal la actual administración no ha podido contener la serie de crímenes, las ejecuciones, desapariciones y secuestros que aún se propalan en algunos municipios del estado, lo que puede empañar los avances que en la materia se han logrado.
El desgaste natural, propio del ejercicio gubernamental, se ahonda cada vez más con la serie de conflictos que se generan en un escenario en el que la sucesión gubernamental avanza de manera inexorable, pero en la que se no se manifiesta la fortaleza del “fiel de la balanza” para poder conducirla.
Los aspirantes priistas buscan de manera precipitada el acercamiento con el líder nacional tricolor, Manlio Fabio Beltrones, con quien se toman fotografías y filtran informaciones a los distintos medios de comunicación para posicionar preponderancia en las preferencias del político sonorense.
Sin embargo lo que se observa en contraparte es un activismo intenso del líder nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador en Zacatecas, en donde todo parece indicar que tiene la puerta abierta para hacer proselitismo, puesto que nadie tiene la iniciativa para contrarrestar el avance de su estrategia.
Las distracciones y los frentes abiertos por la oposición en distintos ámbitos, podrían generar la pérdida del rumbo y de la conducción del estado, en momentos en los que es necesario concentrar la energía en la solución de los problemas internos para fortalecer la propuesta electoral del 2016.
Mientras tanto, la aprobación del empréstito sigue en suspenso.
Al tiempo.