Por Juan Gómez (@juangomezac)
Director general de Pórtico Online
Los asiduos usuarios de las llamadas redes sociales, sinónimo de la participación ciudadana a través de Internet en los distintos espacios de comunicación digital, observan cómo están siendo utilizadas en la función pública, en el ámbito político, en el periodístico y por supuesto en lo social.
El acceso a redes sociales a través de dispositivos móviles que facilitan la accesibilidad a la comunicación interpersonal, pero sobre todo a la información cotidiana, está modificando de manera dinámica la forma de informarse y por lo tanto, desplaza a los medios de comunicación controlados por los gobiernos.
Como periodista que inició su trabajo reporteril a finales de la década de los 70s he tenido la fortuna de vivir la transformación tecnológica en los medios de comunicación, pasar del teletipo al telex y de ahí al tele fax para desembocar a la era internet y su rápida evolución a la telefonía celular y demás dispositivos móviles.
El teléfono forma parte también de estos cambios que vivimos en la actualidad. Pocos recuerdan, por ejemplo, que los teléfonos eran mayoritariamente negros y de disco, conectados a una red que controlaba el gobierno mexicano a través de Teléfonos de México (Telmex).
De acuerdo a datos de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), al cierre del 2012 “México rebasó por primera vez la barrera de 100 millones de suscripciones en telefonía móvil, llegando a 100.6 millones..”. (http://www.dineroenimagen.com/2013-02-26/16650)
Probablemente esta cifra es superada en la actualidad, puesto que en las familias prácticamente sus integrantes tienen un dispositivo móvil, además del teléfono fijo que la gran mayoría mantienen en sus casas.
Algunos gobiernos tanto estatales como municipales están generando aplicaciones a las que denominan de “gobierno abierto” para mejorar la atención a la ciudadanía a través de una respuesta más inmediata a las fallas en los servicios públicos o bien, para acercar y facilitar la obtención de documentación oficial o la realización de pagos a la hacienda pública.
Sin embargo hay una aplicación que se ha convertido en todo un fenómeno social y político: Periscope, que va creciendo de manera muy dinámica, sobre todo porque muestra en tiempo real los videos en la red, en donde los usuarios pueden participar con sus comentarios.
Sin duda que en los últimos días quien ha puesto esta aplicación en un dominio público más amplio es Arne Sidney Aus Den Ruthen Haag, un ex militante del Partido Acción Nacional que ha sido diputado en la Asamblea de la Ciudad de México (1977), jefe delegacional en Miguel Hidalgo (2000) y diputado suplente en la Asamblea CDMX en el 2006.
Actualmente es el city manager de la delegación Miguel Hidalgo y su controvertida actuación para exhibir a través de Periscope las violaciones al reglamento de la delegación, sin importar si son ciudadanos, empresarios, funcionarios o políticos, le imprime a esta aplicación una utilidad destacada en la función pública.
Sin embargo cuando esta aplicación es llevada a la política, como lo hizo la delegada de Miguel Hidalgo, Xochitl Gálvez, al subir a las redes sociales la filmación en tiempo real de la fiesta de cumpleaños de Diego Fernández de Cevallos en su rancho de Jerécuaro, Guanajuato, a la que concurrieron y convivieron personajes como los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari y Felipe Calderón; los empresarios Carlos Slim y Olegario Vázquez Aldir; el ex dirigente nacional perredista, Carlos Navarrete; el cardenal Norberto Rivera Carrera; José Córdoba Montoya y el periodista Ciro Gómez Leyva, entre otros.
La “imprudencia” o ligereza de la delegada Xóchitl Gálvez permitió ver las redes de convivencia, los vínculos que tienen y sostienen tanto ex presidentes, empresarios, políticos, dirigentes de partidos y miembros de la alta jerarquía católica, lo que detonó en diversos comentarios y cuestionamientos en las redes sociales y en los medios de comunicación formales.
Periscope es una aplicación de Twitter que tiene poco tiempo de estar en las redes sociales (2015), pero la novedad de su presencia está ganando cada vez más seguidores que ven la oportunidad de transmitir, en tiempo real, los acontecimientos que creen importante dar a conocer al público. Su uso es cada vez más popular.
Este tipo de aplicaciones o de instrumentos de comunicación que se agregan a otros que son utilizados en la red, están marcando la pauta del cambio no solo en las formas de convivencia, entretenimiento o de información, sino en la manera de ejercer el gobierno y la política, lo que puede transformar a la democracia en nuestro país.
Internet está generando muchos cambios en la política y en los gobiernos en el mundo, porque los acontecimientos y las movilizaciones callejeras se han vuelto virales en la red, lo que está presionando a la política mundial.
En la obertura de su libro “Redes de indignación y esperanza” (primera edición 2012; primera reimpresión 2013). Alianza Editorial, S.A. Madrid, 2012, 2013) Manuel Castells señala:
“Ocurrió cuando nadie lo esperaba. En un mundo presa de la crisis económica, el cinismo político, la vaciedad cultural y la desesperanza, simplemente ocurrió. De pronto, la gente derrocaba dictaduras sólo con sus manos, aunque estuvieran cubiertas con la sangre derramada de los caídos. Los magos de las finanzas pasaron de ser objeto de envidia pública a objetivo de desprecio universal. Los políticos quedaron en evidencia como corruptos y mentirosos. Se denunció a los gobiernos. Los medios de comunicación se hicieron sospechosos, la confianza se desvaneció”.
En este contexto vendrían los cambios empujados por ciudadanos indignados y hartos de dictaduras en el mundo árabe y los abusos, corrupción e ineficacia en el manejo de las economías de los gobiernos en Grecia, Italia, España y en Wall Street, en los Estados Unidos.
Periscope puede ser una aplicación que continúe con los cambios que necesita el mundo democrático para tener mejores gobiernos, gobernantes y representantes populares; empresarios y medios de comunicación.
Al tiempo.