Miles de españoles se lanzaron este sábado a las calles vestidos de blanco o envueltos en la bandera nacional para mostrar su rechazo a la independencia unilateral de Cataluña.
Con concentraciones en Madrid, Barcelona y otras ciudades, dejaron traslucir la ansiedad de años de desconfianza entre la región del noreste de España y el resto del país.
Con banderas blancas y ropas del mismo color, miles de personas pidieron al jefe de gobierno, Mariano Rajoy, y al presidente catalán, Carles Puigdemont, que desactiven el conflicto y dialoguen.