La Organización Panamericana de la Salud (OPS) llamó hoy a los países de la región a estar vigilantes y prepararse ante una “potencial introducción” del virus del Ébola, por lo que realizó varias recomendaciones para evitar un contagio.
“Todas las acciones en las Américas deben estar orientadas a prevenir (…) la eventual introducción de un posible caso importado”, señaló Marcos Espinal, director del Departamento de Enfermedades Transmisibles y Análisis de la Salud de la OPS.
El llamado se produce luego de que la directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, declaró este viernes que el brote del virus del Ébola en África occidental es una “emergencia de salud pública de preocupación internacional”.
El actual brote del virus del ébola se inició en Guinea en diciembre pasado, propagándose a Liberia, Nigeria y Sierra Leona. Hasta el 6 de agosto, esos países han reportado mil 779 casos, incluyendo 961 muertes, por lo que se considera el mayor brote de ébola registrado.
La OPS recomendó no prohibir de manera generalizada el intercambio comercial o los viajes internacionales, sin embrago, apuntó que se deben aplicar restricciones de viaje en los casos de personas diagnosticadas con ébola y a quienes hayan tenido contacto con éstas.
“Los Estados deberían proporcionar a los viajeros a zonas afectadas o de alto riesgo la información pertinente sobre los riesgos, las medidas para minimizarlos y consejos sobre cómo actuar en caso de posible exposición” al virus, resaltó la OPS.
Asimismo, la entidad advirtió que los países deben de estar preparados para detectar, investigar y atender casos de infección por el virus del Ébola.
Consideró que además se debe contar con laboratorios calificados para el diagnóstico del virus y, en su caso, tener capacidad para manejar a viajeros procedentes de zonas infectadas que presenten algún síntoma en los aeropuertos internacionales o pasos fronterizos terrestres.
Asimismo, recomendó a los gobiernos proveer la información “exacta y pertinente” sobre el brote de ébola, así como las medidas para reducir los riesgos de exposición.
La OPS manifestó que los Estados de la región deben estar preparados también para facilitar la repatriación de sus ciudadanos, incluidos los profesionales de la salud que hubieran estado expuestos al virus del Ébola.
Las acciones de vigilancia recomendadas incluyen la detección y el aislamiento de los casos confirmados en hospitales designados para su atención, observando protocolos médicos para tratamiento y control de infecciones.
Además de la identificación y seguimiento en los casos de personas que tuvieron contacto con los pacientes infectados.
La OPS apuntó que los países deberán tomar muestras y enviarlas a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos o al Laboratorio Nacional de Microbiología de la Agencia de Salud Pública de Canadá, que trabajan en cooperación con la OMS.