Australia y Nueva Zelanda criticaron este domingo a Corea del Norte, un país al que el gobierno australiano tachó de “grave amenaza” y al que el neozelandés acusó de tener “intenciones maléficas”.
Corea del Norte debe “invertir en el bienestar de sus ciudadanos que sufren desde hace mucho tiempo y no en armas de destrucción masiva”, declaró este domingo la ministra australiana de Relaciones Exteriores, Julie Bishop.
La víspera Bishop calificó a Corea del Norte de “grave amenaza”, provocando una reacción del gobierno norcoreano.
“Si Australia persiste en seguir los pasos de Estados Unidos para aislar y asfixiar a Corea del Norte, eso sería suicida”, declaró un portavoz del ministerio norcoreano de Relaciones Exteriores.
La ministra australiana “debe pensar dos veces en las consecuencias”, agregó.
Por su parte, el ministro neozelandés de Defensa, Gerry Brownlee, acusó a Pyongyang de tener “intenciones maléficas”, en declaraciones a la televisión New Zealand.
“Corea del Norte envía misiles al mar de Japón y profiere múltiples amenazas escandalosas, incluso contra Australia”, declaró Gerry Brownlee.